Reducir el riesgo de la obsolescencia de los componentes
Alastair Jupp, Responsable de Plataformas Digitales en RS Components, habla sobre el problema de la obsolescencia de los componentes electrónicos y presenta una nueva herramienta para ayudar a los ingenieros a seleccionar los productos adecuados y conseguir la sostenibilidad de los proyectos a largo plazo.
La amenaza de la obsolescencia de los componentes aumenta en nuestro sector, complicando cada vez más la cadena de suministro. La obsolescencia puede costar millones de euros, dólares o libras a la industria en rediseño y revisión de productos, demoras e inventarios adicionales.
En un momento cualquiera, la típica empresa de fabricación de componentes electrónicos puede tener entre decenas y miles de proyectos en curso. Cada uno de ellos puede contener miles de componentes de cientos de proveedores distintos. Con toda probabilidad, cada componente estará en una fase distinta de su ciclo de vida: solo hace falta una pieza obsoleta para terminar con la existencia de un producto electrónico.
Obsolescencia
El ciclo de vida medio de un CI es ahora de ocho años y va a seguir disminuyendo con la aceleración continuada de las nuevas tecnologías. Según los datos del analista de mercados IHS Markit, cada día los proveedores de componentes publican 28 notificaciones de cambio de producto (PCN) y 22 comunicados de fin de línea (EOL). El peligro se agrava porque aproximadamente un 11% de los EOL dan menos de 30 días hasta la fecha de la última oportunidad para comprar (LTB) el componente.
Otro factor que añade incertidumbre a la cadena de suministro es el nivel inusitado de fusiones y adquisiciones entre fabricantes y proveedores de semiconductores de estos años pasados, que continúa todavía. Hay muchos motivos para esta consolidación, con un mercado que ni siquiera se aproxima a las tasas históricas de crecimiento y deja pocas oportunidades para el crecimiento orgánico. Además, los costes de I+D siguen subiendo, especialmente para el desarrollo de tecnologías innovadoras y procesos de fabricación de semiconductores. Además, las grandes empresas están modificando su cartera de productos para dar una mejor respuesta a las oportunidades creadas por el Internet de las cosas (IoT). Si bien la consolidación de dos empresas que se fusionan puede dar lugar a mejores precios para los clientes, además de otras ventajas, el lado negativo de esta actividad es que fomenta una mayor complejidad a la hora de controlar el riesgo de la situación de las piezas. La racionalización de las carteras de productos fusionadas puede ocasionar problemas importantes de obtención y disponibilidad de componentes, incluidos los casos de EOL de muchos componentes y líneas de productos, así como posibles cambios en los procesos de fabricación o en la numeración de las piezas.
Para complicar aún más la situación de aprovisionamiento están los informes de falsificaciones, de los que aproximadamente un 71% están formados por avisos de EOL, piezas no recomendadas para diseño (NRFD) o reeemplazadas. En conjunto, todas estas dinámicas del mercado conllevan una gran incertidumbre para la cadena de suministro, que además va a exigir una mejora en la gestión de la obsolescencia de los componentes.
Función de ingeniería
Otro punto de interés es el cambio en la función del ingeniero de diseño, que ha evolucionado considerablemente en la última década. A medida que los equipos de ingenieros se reducen, se espera que los ingenieros se encarguen de áreas de diseño que antes estaban diferenciadas como la distribución de las placas, potencia o RF y similares. Ahora las cosas están cambiando aún más con el desarrollo del comercio electrónico, ya que se espera que los ingenieros participen en el proceso de compra. Para este proceso es fundamental que los ingenieros dispongan de información correcta para garantizar que haya componentes mientras dure el proyecto.
El diseño para la sostenibilidad de la fabricación es más importante que nunca y la gestión de la obsolescencia debe comenzar al principio de la fase de diseño, no como una ocurrencia tardía. Estar mejor preparados para abordar las fluctuaciones en la cadena de suministro puede resultar beneficioso para el tiempo de comercialización, gracias a una mayor eficiencia en el diseño, menores costes de fabricación y producto y una mayor rentabilidad.
Medir el riesgo
Para solucionar la necesidad de una mayor visibilidad del ciclo de vida de los componentes y evaluar los riesgos, RS ha desarrollado un Gestor de obsolescencia (RS Obsolescence Manager), elemento clave de la comunidad DesignSpark para ingenieros, que da acceso a herramientas, recursos y conocimientos gratuitos, la nueva herramienta es un recurso de ingeniería en línea completamente gratuito que se ha creado específicamente para gestionar de forma proactiva el riesgo de la obsolescencia de los componentes.
Con esta herramienta se pueden crear listas de piezas que permiten a los ingenieros buscar componentes y soluciones mediante el acceso a millones de documentos técnicos y otros recursos que les ayudan a elegir la pieza adecuada desde una perspectiva técnica. El gestor de obsolescencia aumenta esta capacidad dando acceso al ciclo de vida de componentes de 400.000 productos disponibles en RS. A partir de la cartera de productos principales y accesorios del distribuidor, la selección incluye semiconductores, pasivos, conectores, relés, fuentes de alimentación, conmutadores y muchos otros dispositivos eléctricos y electrónicos. Fundamentalmente permite que los ingenieros tomen decisiones técnicas y comerciales cuando seleccionen un componente.
Una vez que se ha creado la lista de materiales, la herramienta proporciona una instantánea del riesgo de obsolescencia, pero también emplea la tecnología predictiva para supervisar los datos de ciclo de vida y prever cualquier problema de EOL, con lo que aporta una mayor confianza de que los elementos seleccionados van durar mientras el proyecto esté vigente. RS también va a facilitar actualizaciones periódicas de la información del ciclo de vida de los componentes.
Además, la herramienta sugerirá soluciones alternativas para componentes problemáticos. Mediante el acceso a la base de datos de IHS Markit, que ofrece más de 70 millones de soluciones alternativas, la herramienta de selección de componentes alternativos examina una serie de criterios clasificados para encontrar una lista de posibles opciones para un componente que plantee problemas. Los motores de selección incluyen "forma, idoneidad y función", "sustitución directa", "equivalente funcional" y "producto similar" donde más de un atributo coincide con las características del componente seleccionado.
Futuro
En la actualidad, la herramienta está claramente enfocada a las primeras fases del ciclo de diseño, es decir, las fases de estudio, propuesta, diseño y prototipo. Sin embargo, en el futuro las capacidades de la herramienta se ampliarán para utilizarse en las fases posteriores de "pedido, construcción y mantenimiento" del ciclo de diseño. Por ejemplo, en los 12 próximos meses, RS va a ampliar la cobertura de productos de la herramienta para incluir otros doscientos o trescientos mil productos que se pueden comprar directamente a RS. Otras funciones que se van a incluir son búsquedas de varias piezas, posibilidad de compartir listas de piezas con colegas y compra de piezas en "un clic", para que los ingenieros pasen directamente al proceso de transacción. Todos estos cambios adicionales se irán adaptando con los comentarios de la comunidad de ingenieros de DesignSpark.
En resumen, la nueva herramienta va a amortiguar el riesgo de la obsolescencia de componentes previendo los problemas de fin de vida y ayudando a encontrar la solución para piezas con problemas. Básicamente, va a permitir usar mejor el tiempo y los recursos de ingeniería.
RS Obsolescence Manager está disponible en DesignSpark.