Existen numerosos caudalímetros, pero cada uno de ellos es adecuado para diferentes tareas. La elección correcta del medidor para cada caso no solo puede evitar costosas paradas de la producción, sino también contribuir a lograr una larga vida útil de las tuberías y de los depósitos y, en definitiva, a reducir las labores de mantenimiento. Por lo tanto, es importante tener en cuenta los siguientes factores a la hora de comprar:
Tipo de medio que va a medir
Define exactamente las características de la sustancia cuyo caudal desea medir. ¿Se trata de un líquido, de un gas o de vapor? ¿Está contaminado o contiene muchas burbujas o partículas en suspensión? ¿Cuáles son las propiedades físicas (viscosidad, presión, temperatura, conductividad, densidad) de la sustancia? ¿Se mantienen constantes en diferentes condiciones?
Características de funcionamiento y rangos de presión, caudal y temperatura
Los diferentes caudalímetros resultan adecuados para propiedades de material distintas. Por lo tanto, asegúrate de que cumplen los criterios de aplicación y principios de funcionamiento correspondientes en materia de densidad, viscosidad, consistencia del flujo y corrosividad. Dependiendo del diseño y del precio, los caudalímetros pueden tener diferentes valores máximos y mínimos de presión, temperatura y rango de caudal.
Rango de medición
El rango en el que el caudalímetro puede medir con precisión debe ajustarse lo máximo posible a la aplicación prevista para mantener una tasa de errores reducida.
Precisión de las mediciones
Uno de los aspectos más importantes de los caudalímetros en cuanto a su funcionamiento, se basa en su precisión, que se expresa como intervalo hacia arriba o hacia abajo en porcentaje. Lo mejor es utilizar como base el valor efectivo medido, pues de este modo la tasa de errores se mantiene constante, aunque cambie el caudal. A veces también se da como una desviación porcentual respecto al intervalo calibrado o al valor final. La precisión de la medición no solo debe garantizarse con el caudal normal, sino también con el caudal mínimo o máximo. El fabricante deberá proporcionar las especificaciones correspondientes para estos tres casos.
Repetibilidad
Algunas aplicaciones requieren menos precisión, pero necesitan disponer de una alta repetibilidad, que se refiere a cuántas veces se obtiene el mismo resultado si se realiza una medición de caudal varias veces en las mismas condiciones.
Piezas móviles
Las piezas móviles de los caudalímetros pueden provocar errores y dar lugar a un mayor desgaste o a más labores de mantenimiento. Además, la medición puede perder precisión con el tiempo debido a ese movimiento. Esto puede resultar un inconveniente y favorecer la elección de caudalímetros electromagnéticos, los cuales no tienen piezas móviles.