Las infraestructuras más recientes de carga de vehículos eléctricos (VE) en Europa incluyen varios métodos de recarga de baterías, que se clasifican principalmente en puntos de carga de corriente alterna (AC) y corriente continua (DC). A nivel básico, la carga de vehículos eléctricos mediante corriente alterna se puede realizar utilizando un cable y enchufe básicos sin necesidad de funciones adicionales. Sin embargo, para una mayor seguridad, es recomendable utilizar una estación de carga dotada de un cable de carga con enchufe normalizado con una función de control y un sistema de protección personal contra descargas.
Las estaciones de carga dedicadas alimentadas en corriente alterna, menos complejas, vienen con cables de carga para VE confeccionados con conectores que incluyen funciones de control básicas, asegurando una conexión segura entre la estación y el vehículo eléctrico. Las estaciones de carga de corriente continua, conocidas por su capacidad de carga rápida, requieren más funciones de control, debido a la tecnología de conversión de energía y refrigeración necesaria, por este motivo, se utilizan cables de carga específicos para VE con funciones de control más avanzadas, proporcionando una conexión y comunicación robusta entre el punto de carga y el VE.
Tanto los puntos de carga de corriente alterna como los de corriente continua pueden diseñarse incorporando equipos esenciales de TE Connectivity, como relés de potencia, contactores DC, conectores de potencia y señal, resistencias de potencia, interruptores y filtros. Estos componentes garantizan un rendimiento fiable y eficiente en los sistemas de carga de vehículos eléctricos.