Los instrumentos de medida suelen estar ubicados en las instalaciones bien del fabricante del instrumento a medir o bien de un proveedor de servicios autorizado por ese mismo fabricante. Estas instalaciones deben cumplir una serie de requisitos en base a las exigencias legales y normativas del país.
Existen organizaciones que se encargan de que las empresas lleven a cabo estos procedimientos de forma correcta. Por lo tanto, los procedimientos deben quedar documentados, la trazabilidad de sus actividades registrada, y el personal debe estar calificado y certificado para las labores que realiza.
En el caso de España y Reino Unido, este papel lo cumplen las agencias de evaluación de la calidad y acreditación, conocidas como ENAC y UKAS respectivamente.
ENAC y UKAS
La Entidad Nacional de Acreditación (ENAC) es una agencia de evaluación de la calidad y acreditación que opera en España.
El United Kingdom Accreditation Service (UKAS) es el organismo nacional de acreditación del Reino Unido, con responsabilidades equivalentes a las de la ENAC.
Por otro lado, la International Accreditation Forum (IAF) es una organización internacional que representa a los organismos nacionales de acreditación del mundo, y la European Cooperation for Accreditation (EA) es una organización intergubernamental que agrupa a los organismos nacionales de acreditación de los países miembros de la Unión Europea. Ambas otorgan una garantía de calidad de los servicios de certificación y calibración a nivel mundial.
La equivalencia y el mutuo reconocimiento entre el UKAS y la ENAC se basan en los siguientes puntos:
- Ambos organismos disfrutan de la acreditación por la EA.
- En ambos se aplican los mismos criterios de acreditación.
- Utilizan los mismos métodos de evaluación.
- Tienen los mismos requisitos de supervisión y vigilancia.
Tanto la IAF como la EA han reconocido la equivalencia del UKAS y la ENAC, lo que significa que sus resultados son aceptados mutuamente.
¿Cuál debe ser la frecuencia de calibración de un instrumento?
La calibración de los equipos de medida depende de diversos factores. No todos los instrumentos de medida operan bajo las mismas condiciones ni tienen la misma robustez o parámetros de diseño.
Asimismo, la frecuencia de uso no siempre es la misma. Algunos instrumentos se utilizan de forma constante, mientras que otros se usan de forma ocasional. Una frecuencia de calibración demasiado alta de estos instrumentos generaría gastos innecesarios, como tiempo perdido durante la puesta a punto y recursos humanos involucrados en la misma.
Las normas exigen una frecuencia mínima para la calibración de los equipos de medida, y el usuario puede ajustar esta frecuencia en base a este límite mínimo.
La frecuencia para calibrar los equipos de prueba también dependerá de la organización interna de la empresa y de sus protocolos de calidad. Pero no solo los instrumentos están sujetos a calibración; el patrón de calibración que se use también debe certificarse. Ciertos instrumentos, como las balanzas, suelen calibrarse con mayor frecuencia que otros, como los termómetros, por ejemplo.